En los meses de verano los viveristas empiezan a preparar la campaña de flor de invierno de plantas como la dipladenia o la poinsettia, dos plantas que gozan de una gran popularidad entre los amantes de flores y plantas ornamentales.
En este post, te ensañaremos cómo cultivar la dipladenia y la poinsettia y los cuidados que necesitan durante el cultivo, no sin antes explicarte las características más importantes de cada planta.
Características y cultivo de la Poinsettia
La poinsettia o flor de pascua, que es como se conoce a la ‘Euphorbia pulcherrima’, es una planta arbustiva que se caracteriza por sus brácteas de color rojo y es muy típica de la Navidad.
El cultivo de la poinsettia inicia en los meses estivales y su época de cultivo de mayor producción es en agosto. Es una planta que requiere mucho riego por su época de cultivo, sin embargo su raíz es sensible a la humedad, y tiene poca resistencia a encharcamientos, por ello hay que evitarlo seleccionando buenas materias primas.
Como se cultiva en verano y se somete a abundante riego, las materias primas idóneas son la turba rubia gruesa para evitar encharcamientos y aumentar la capacidad de drenaje y la fibra de coco, que promueve el desarrollo del sistema radicular, y aporta una mayor durabilidad y estabilidad al sustrato. Un aditivo muy importante en esta mezcla es la aportación de arcilla granulada, facilitando así el intercambio catiónico.
Características y cultivo de la Dipladenia
La dipladenia, es un género de planta de carácter trepador que se caracteriza por su preciosa floración. Su follaje es perenne y en su hábitat natural llegan a alcanzar varios metros de altura. Su origen tropical hace que este tipo de planta sea sensible al frío y a las heladas.
En verano requiere una mayor frecuencia de riego, pero hay que evitar en todo momento el encharcamiento, ya que provoca asfixia radicular y pudrición de tallos.
La mezcla de sustrato que proponemos o ideal para este cultivo debe de ser de una estructura gruesa (sin presencia de turba fina), fibra de coco y perlita. Esta mezcla de materias primas hace que la planta se desarrolle de manera óptima, evitando encharcamientos y excesos de humedad que afectarían a sus raíces.
El rango de pH es ligeramente ácido, comprendido entre 4’5-5’5.
Abonado de la dipladenia y la poinsettia
Para ambos cultivos es muy importante el abonado, la fertilización debe ser constante y mantenerse hasta el momento de la venta, e incluso la post venta, para evitar la reducción del tamaño de las brácteas y su decoloración.
Se recomienda un fertilizante granulado de liberación controlada de alta calidad ya que en este tipo de fertilizantes, su liberación, depende de la temperatura del suelo o sustrato, la cual está estrechamente ligada a las necesidades de nutrición de las plantas. Un aumento de la temperatura acelera la liberación de nutrientes e implica una mayor actividad metabólica de las plantas y viceversa, garantizando el crecimiento uniforme y vigoroso de las plantas. Es totalmente seguro en las más diversas condiciones. La tecnología de encapsulado asegura la integridad de los gránulos, evitando problemas de toxicidad por exceso de sales o deficiencias por defecto.